No caigas

17 junio 2011

El sutil 'justo detras de ti' y la elegancia de la finta no se limitan a la especie, ni al gremio o a lo simple de la artimaña. Caemos, y además contentos, porque confiando en ellos nos libran del trabajo de pensar con la bula de que nos provocaron, nos lo ordenaron, o simplemente no éramos conscientes de que caíamos como pardillos.


via vayagift.com

O eso deben pensar. En Asuntos Propios (RNE, Toni Garrido escúchalo) comentaban ayer este intento de hacernos creer que nos hemos vuelto gilipollas (con perdón). Yo estoy de acuerdo: no me lo creo, no me creo que después de demostrar durante un mes de protesta ininterrumpida legitimidad y respeto ahora podamos caer en esto como sociedad.
La presencia de agitadores (por mucho que quiten el vídeo, se sigue subiendo) está demostrada y contestada: desde el vídeo a la Policía de Anonymous se llama a las personas que trabajan en estos cuerpos a ejercer su código deontológico, la ética y la responsabilidad. Y desde la plaza y este blog, también. De la mano del libro de poesía:
Constitución española. Artículo 104
1. Las Fuerzas y Cuerpos de seguridad, bajo la dependencia del Gobierno, tendrán como misión proteger el libre ejercicio de los derechos y libertades y garantizar la seguridad ciudadana.
Las funciones, principios y estatutos de estas se regulan en la Ley Orgánica 2/1986, de 13 de marzo, de las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad que todo policía estudia en sus oposiciones, y es allí donde en el Art.5 1.d dice:
En ningún caso, la obediencia debida podrá amparar órdenes que entrañen la ejecución de actos que manifiestamente constituyan delito o sean contrarios a la Constitución o a las Leyes.
Efectivamente no toda orden debe ser cumplida, pues la responsabilidad recae en quien la ejecuta (punto 6 del mismo Art.).
Existe un código deontológico policial, existe una resolución de las Naciones Unidas, existe el Código Europeo de Ética Policial y existe legislación en España que lo explicita con órdenes ministeriales e instrucciones. Lo que no existen son escusas. Y los infiltrados y sus superiores deben responder por andar jugando a hacer el gilipollas (sin perdón).

Así que lo dicho, seas de la especie, gremio, equipo de fútbol, tribu urbana o grupo sanguíneo que seas: a seguir siendo responsable y a no dejar de pensar por ti mism@. Nadie te puede ordenar dejar de hacerlo. Porque sólo así seremos una sociedad madura: No caigas.

1 comentario:

dAv!d dijo...

Qué razón tienes! Difundámoslo entre nuestros conocidos en los diferentes cuerpos! Hagámosles pensar! ellos también son nosotr@s.

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